* En Suchiapa María Cielo no existe, todos la conocen como Cielito, la enfermera que no cobra en el pueblo. Ella, con otras compañeras, lleva 10 días sin comer
rogonchanoticias.com
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. 10 de mayo de 2017 (muralchiapas.com).- Este Día de las Madres se cumplen diez días desde que se inició la segunda etapa de la huelga de hambre por parte de, hasta el momento, el gobierno no ha acertado a resolver el problema y tampoco parece haberlo intentado. La Secretaría de Salud a cargo de Francisco Farrera Ortega y la Secretaría General de Gobierno con Juan Carlos Gómez aranda volvieron a aplazar la reunión con las manifestantes, aunque las horas sin comer sigan pasando.
-Lo siento, no voy a poder atenderlos hoy-, comentó el subsecretario “Utrilla” (así le conocen).
En las cartulinas donde se muestran las horas que van de estos diez días que las mujeres reclaman una solución a la crisis de salud en el estado y un adeudo en crédito de vivienda, ya los dígitos marcan 213 horas sin comer.
Mientras tanto, Utrilla no pudo entregar a las enfermeras datos concretos del resultado de abastecimiento de medicamentos en el estado. No los tenía.
“Y nos vino a decir que lo disculpáramos por no poder platicar con nosotros hoy (10 de mayo), porque no tiene los datos de cómo están en el estado los medicamentos. Se está surtiendo en todo el estado los medicamentos, pero no tiene el avance, según él, lo va a tener hasta mañana en la noche, dijo que lo disculpara y ‘nos vemos mañana (11 de mayo) en la noche’”, cuenta Limbano Domínguez quien hace apenas dieciocho horas festejó el Día de la Madre con Cielo, su esposa, la mujer que lo enamoró con su misterio y con esa luz que irradia de alegría en su familia.
Así la describe, como su espíritu, uno que ahora, en el mediodía del 10 de mayo, no aguanta un cuerpo y necesita de alguien para caminar. No tiene fuerza física y siente como el dolor en el abdomen aumenta.
Límbano es el encargado de dirigir los diálogos con el gobierno del estado. “El subsecretario”, sin especificar si es Utrilla u otro, ha tenido incluso pláticas vía telefónica con él, donde le ha querido dejar en claro que su esposa está en peligro, pero es algo que él ya sabe.
-Tú vas a ganar perdiendo-, dijo el subsecretario en una de esas llamada hacia “el demonio a vencer”, como se refirió en al menos otra ocasión a Limbano. Los diálogos, cuenta el hombre de 50 años, se basan más que nada en plazos, sin nada concreto.
-Se está exponiendo tu esposa, lo material se puede recuperar…- el funcionario de la Secretaría General de Gobierno, hacía por convencer al esposo de Cielo, quien el domingo pasado disfrutó la visita de sus nietos y todavía pudo saludar con un beso que todavía mantenía un color cálido en la piel de la enfermera, tres días después, este diez de mayo su semblante ya es gris, sin embargo, la noche anterior disfrutó de la celebración que organizó su esposo.
-Nosotros no estamos peleando dinero, estamos exigiendo respeto. El dinero es un instrumento para decirte a ti gobierno que no tienes derecho a tomar un dinero que no te pertenece- Limbano cuenta que colgó en esa ocasión la llamada. De eso tiene ya varios días y siguen aplazando las soluciones, para la salud de las enfermeras se cuenta en horas, pero el esposo platica que siguen conociendo de casos donde las personas siguen comprando medicamentos. La crisis de salud en el estado no parece mejorar aunque el gobierno diga lo contrario, sostiene el esposo de Cielo.
Por su parte, el gobierno del estado comunicó en su boletín más reciente sobre los avances que se tienen, al menos mencionando los municipios donde se encuentran hospitales que están siendo abastecidos.
“En cuanto al abasto de medicamentos, pese a que la demanda original era el surtimiento del Hospital Regional Rafael Pascacio Gamboa, la Secretaría de Salud informó que en cumplimento a la Ley de Adquisiciones del Estado y luego que la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS) liberó los recursos financieros asignados a la entidad, se llevó a cabo el proceso de licitación para la adquisición de medicamentos y material de curación, por lo que de manera gradual se están atendiendo las necesidades en las unidades médicas del estado.
En este sentido, además del Hospital Regional Rafael Pascacio Gamboa, los Hospitales de las Culturas y de La Mujer en San Cristóbal de Las Casas, así como en los de Comitán, Teopisca, Chalchihuitán, Palenque, Pichucalco, Chamula y Larráinzar, cuentan ya con el abasto suficiente para atender a los pacientes”, refiere el documento oficial que circuló en medios estatales.
A pesar de que el ejecutivo del estado ha reiterado en los medios de comunicación que no existe necesidad de que Elizabeth Hernández Pereyra, Emma Escobar López, María Cielo Gramajo Cundapí, Nely Ivón Castillo Escobar, Gabriela Mayanin López Cruz, Rosy Eroyda Pérez Lázaro, Claudia Elizeth Martínez Camacho, Verónica Zenteno Pérez y Karla Gloria Sevilla Culebro estén sin comer -una opinión que ellas no comparten-, ellas quieren resultados claros.
La manera como el movimiento mide los avances es en las personas.
El subsecretario Utrilla se fue porque no tiene datos concretos, cifras exactas del abastecimiento. Durante tres días de plática con los integrantes de la huelga, se ve que ellos miden si ya se resolvió la crisis de salud en Chiapas a través de las historias de las personas que llegan. Mientras sigan conociendo de personas que carecen de medicamentos, así sea en el rincón más pobre de Chiapas, las enfermeras seguirán sin comer. No existe un avance que las convenza de lo contrario hasta el momento.
La otra petición que tienen los inconformes es el pago del Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste), lo cual significó un monto de 51 millones 737 mil 632 pesos y que, en el boletín de gobierno se recalca fue pagado desde el 02 de mayo, fecha donde circuló la fotografía del cheque.
Sin embargo, el problema es que no ha disminuido la deuda personal de cada uno de los afectados, Cosa que el gobierno del estado ha minimizado, calificando el hecho como “falla técnica”, mientras que los afectados hablan de "robo”.
Hasta el mediodía de este diez de mayo, en la cuenta personal de cada involucrado no hubo ningún pago, siguen endeudados.
“No, si tengo que morirme adentro…pero este pinche gobierno que me respeta, me respeta”, esas palabras se las dijo Cielito a Límbano cuando resolvió que el primero de mayo volvería a declararse en huelga de hambre, la huelga inició desde el 24 de enero e iniciaron la primera etapa de huelga de hambre el 3 de abril junto con sus compañeras dejó de comer hasta que el 12 de abril se llegó a un acuerdo que el 21 de abril estaría depositado el monto del Fovissste.
Cuenta que fue en el carro de regreso a su casa que decidió que desde el pasado Día del Trabajo iniciaría una huelga de hambre que podría en riesgo la salud de la enfermera a pesar que tras la primera huelga ya presentó sangrado en la boca y aún seguía débil. Su esposo respeta su decisión y en los diálogos con los funcionarios deja en claro que ellos son los responsables de una crisis de salud que le podría costar la vida a su esposa.
Cielo es un misterio. Cielo llegó un día después de terminar la secundaria y se regaló al hospital Rafael Pascacio Gamboa, se dedicó día y noche a cuidar como voluntaria, ahí conoció a Límbano, pero para él, ella sigue siendo un misterio envuelto siempre con una sonrisa, buscando causar siempre la menor preocupación, un misterio que le enamoró hace muchos años. A los 26 años María Cielo Gramajo decidió terminar la preparatoria y luego la licenciatura, ya tenía a sus dos hijos, Dorian y Karla, jóvenes que admiran lo que su madre realiza.
“Yo no necesito motivos, al contrario, yo apoyo a mi mamá por ser quién es y si ella decidió estar en una huelga de hambre pues mi madre tiene todo el apoyo mío, es algo dfícl de comprender porque sabemos que hay muchos riesgos, sabemos que eol día de mañana se puede morir… claro nos duele por ser mamá, pero es una decisión que tenemos que aprender a respetar”, comenta Dorian Jovani.
Karla por su parte también respeta a su madre, de ella recuerda el apoyo que le da con su menor quien tiene una condición psicomotriz aún no diagnosticada, lo que le absorbe a la madre tiempo y que la abuela trata de minimizar.
Este día de las madres la condición de María Cielo Gramajo es delicada ya no se ve radiante como en días pasados, por más que oculta su estado, su esposo la ve mal, se le está yendo y para él que el gobierno aplace por un día es demasiado.
Son la una de la tarde y van 213 horas sin comer. Hasta hoy son nueve enfermeras.
